7 jun 2011

El Único Baile de a Dos

Si es que me quiero queriéndote.

Que te avisto en la multitud y la luz multicolor sólo pone gris el panorama. Que nadie puede taparte, ni relatando dramas. Mi drama eres tú y eres el mejor, pues me haces llorar y no necesito careta. Que mi cara contigo es una, y no eres calva como la fortuna.

No me canso de escibirte, ni de amarte y de serte. Que soy tuyo y lo sabes. Que eres libre y de nadie, que tu cama es un hábitat y tiene solo un habitante.

No contaré mis proezas.
Para eso no son mis letras.

Mis letras son para el temor, tal vez para el amor y seguro para la guerra. Que mi cuerpo es una guerra, y la soledad mi condena. Al menos así no hay bajas, ni consecuencias. Que sin mi el mundo giró años, que le hará otra alma en pena?

Que tampoco soy una.
No tengo pena alguna.

Solo tengo mis pocos años y esta pluma, que me la dió un señor desde las alturas. No puedo hacer más que estos inventos y jugando a la alquimia con los sentimientos, no interesa estar muerto. Que eres más importante que la vida, la muerte, los ángeles de Dios y los cortejos funebres. Que todo eso lo tengo, y te quiero hasta teniéndote.

Si hubiera un sólo angel.
No tendría papel en nuestra novela.

Son pocas palabras y muchos inventos, no me da la cara. Si la tinta fuera oro, yo por tí me quebraría. Y no soy como los insensatos, que pretenden almidonarte con promesas incumplibles.

Que no te prometo nada.
Tú tampoco lo hagas.

No se qué hablo de idiotas, los conoces a montones y no han hablado de mí. Ellos no me conocen, pero yo los veo es tus ojos. Tu deseo es mío, al menos hasta que cierre los míos. Poco hilo ya me queda, pero es que contigo las palabras vuelan.

Y me encuentran a la mañana.
No necesitan salir de la cama.

Y perdón si me pongo explícito, no lo hago porque lo necesito, lo hago porque lo hago. Que no te necesité nunca, y aquí me tienes presentado. No tengo cuotas de amores, hipotecados corazones ni para otras canciones. Soy libre y tuyo, soy de nuestras pasiones.

 

Todo eso lo tengo.

Y te quiero hasta teniéndote.

11 may 2011

Odios


Odio el escribir sólo una parte y tener que mostrarlo.
Odio el leer poco y nada y tener que admitirlo
Odio caminar mucho y saber que es tarde.
Odio que me cueste tanto explicarme.
Odio que todo me sea tan simple.
Odio que mi vida sea excusa.
Odio ser un maldito niño.
Odio tener que decirlo.
Odio mostrarlo hoy.
Odio la tardanza
Odio la vida.
Odio esto.
Odio.

10 may 2011

Culpas y Castigos

No puedo evitarlo, ser el Capone de tu isla. El blister de tu pastilla, la bolsa de cocaína. No puedo evitar ni soy culpable, de ver debajo de la falda de alguien. De ver con mis ojos tu propiedad, tus deseos, frustraciones, de lograr evitar tu soledad. No me castigues, por ver tu compañera, por seducirla, por hacerla gritar. La risa es mi aliada y quedan pocos lugares, pocos para sin ella hablar.

Mi castigo es que pretendan castigarme por hablar por algo más que hablar, mirando viendo y volver a mirar, tu suerte está echada y no es castigar ni culpar. Tu castigo no es el mío, y no me quedan culpas por enterrar. Si mis ojos son más lindos, mi diversión mas fugaz o mi alma más capaz, para qué hablar?. Para qué culpar?.

La culpa es de la esquina, no del que la doblará. Ella estaba allí, antes de invitarla a flotar, antes de que la intentes cautivar. El castigo que encuentro o busco y tomo propio es el de no poder otra forma encontrar, para amar. Amame de la única forma y sabrás amar. Contale mis cuentos a ella y solo la perderás. El engaño dura poco, y ya no me querrás...castigar.

Agradecé que no toco una guitarra, que no miro pinturas con tu ademán. Tenés tus pequeños refugios donde mi parla triste y mis ojos del demonio nunca habitarán. Pero sabés, que nada anhelés más, que disputarla en mis terrenos, pretender ganar. No te culpo, amigo mío, espero que sepas ganar. Se gana en la competencia, o sabiendo callar. Soy callado y algo quieto si, pero no dejo de mirar.

Sólo es que suelo mirar.

Atrás.

9 may 2011

Paula

En mi casa tú no estabas
No salía del Edén
Ni esperaba en un andén
Lo que tú esperabas

En mi camino no te cruzabas
Yo cambiaba de parecer
Mientras ocultabas
Tu tristeza al anochecer

En la puerta no te buscaba
Me dejaban entrar
En la fila no te tapaba
Ni daba fuego para fumar

En la barra no te vendían
Ni se me apetecía tomar
Mis amigos me servían
Y brindaba por brindar

En el brindis no te hallabas
Para dejarte embriagar
En esos ojos que soñabas
No morir para encontrar

En la muerte no te pedía
A cambio de mi alma
Es que nada sentía
Nada más que mi calma.

En la vuelta no te abrazaba
No había frío ni tardanza
Te faltaba lo que daba
Ni tenía lo que no alcanza.

En ese andén tú si estabas
Y la manzana por comer
Ya no era el que esperaba
Ni se te daba por correr

Entonces eras el camino
Y uno solo mi parecer
Aunque el tuyo ocultabas
No resultó triste tu amanecer

En la puerta yo te miraba
Y aunque quería pasar
La noche no nos dejaba
Más que sentirnos y fumar

No había barra ni bar
Pero eras tú la que servía
El juego loco de brindar
Por lo que pasaría.

Brindamos por dejarte
Dejarte dejar de soñar
Esos ojos encontraste
Y te morías por no mirar

Esa noche te pedía
Mi alma mía ya no era
 La noche ya era día
Y del alba tú mi compañera

En la vuelta no te abrazaba
Había frío y esperanza
Que tenías lo que daba
Y yo más de lo que alcanza.

25 abr 2011

A la Esquina de la Vuelta

Es frío y gigante, sobre mi espalda. 
Tremendo, tres letras su palabra.
No siente, no teme a nada.
Su avance, no tiene parada.


Revolotea, como un niño.
Su daño, sútil y fino.
Naturaleza, corrosiva.
Expectativa, ni la vida.


Moribundo, con mil heridas.
Me arrastro, a la salida.
Veremos, si me pierdo.
O si la encuentro, eso espero.


No importa condición.
Para su rendición.
Sólo o con compañía.
Dejar de ser de rapiña.


La llamada de atención.
La daga del peor.
El duelo de las victimas.
Las calles nunca tibias.

14 abr 2011

Juegos

No pares mi amor
no pongas final
esto no tiene
si tú no lo entiendes
será el final.

No
no te detengas
no me molesta
ahogarme contigo
ahogarme en tí.
 

Déjame
déjame volar
yo te lo juro
y lo prometo
llevaré, tus manos al viento.

No busques 
ya lo sabrás
buscando se encuentra
pero es mejor
que, te encuentren.

No hay rincón
del suelo sin nos
el tiempo sigue
nosotros también
ámame otra vez.


Entiendes
que debes soltar
mi mano es tuya
déjala ya
y vuélvela a tomar.



No pares mi amor
no
déjame
no busques
no hay rincón.



Entiendes.







9 abr 2011

Fríos Cobres

 Difícil irse cuando queda por quién perderse, difícil irse, sin extrañarte. Las monedas no alcanzan a valer lo que encontrarte, y sobran cuando en mi frío asiento sigo besándote.

 Y no caigo en la cuenta de lo que vales. Cuánto vale algo que no cuesta? como un gusto se vuelve una necesidad, o cómo gusta que algo se necesite? cómo saberte vicio mas no enfermedad? no hay síndrome alguno en mí, de sufrir abstinencia de tí.


 No mas que estas pocas letras, pero incluso aún sigues aquí.


 Cuando en mi frío asiento sigo besándote.